El tarot es una herramienta que trabaja a varios niveles: ya sea interpretativo, evolutivo, autoconocimiento, sanación.
El tarot está formado por 78 cartas o láminas que se dividen en dos grupos: los arcanos mayores y los menores. En ellas está representada la sabiduría, el conocimiento colectivo y universal. A través de ellas podemos conectar con el inconsciente colectivo.
El tarot aporta información, muestra los diferentes caminos y las posibilidades que se presentan en nuestra vida, aporta respuestas a nuestras preguntas e inquietudes. Permite que nos conozcamos más y mejor.
Es importante recordar que el tarot orienta, no determina. Siempre somos nosotros los que decidamos qué decisión tomar.
El tarot ayuda a conocernos y reconocernos, a saber cuáles son nuestros puntos fuertes y cuáles los débiles. Cuánto más y mejor nos conozcamos, estaremos más preparados para llevar a cabo nuestras metas, realizar nuestros sueños y vivir con mayor consciencia el día a día.
Quizá el nivel más conocido es el interpretativo y orientativo: nos brinda la información que necesitamos tener y saber en un momento o ante una situación determinada. Mostrará las diferentes posibilidades, opciones o caminos que se presentan ante nosotros.
Ejemplo:
La carta XIX El Sol, entre otras acepciones, habla de amor, del amor verdadero.
Siempre es una carta muy positiva que va ayudar a que todo conflicto o preocupación se resuelva favorablemente y de manera beneficiosa.
A nivel evolutivo y de autoconocimiento: aquí, el enfoque es hacia dentro. El crecimiento personal y evolutivo nos lleva a reconocer nuestra esencia, a saber quiénes somos, a potenciar nuestras cualidades y trabajar y pulir nuestras sombras.
El crecimiento personal, es la puerta que nos lleva a conectar con quienes somos, con nosotros mismos, con nuestra esencia.
Este proceso dura toda la vida: está lleno de aprendizajes y de redescubrimientos sobre nosotros mismos.
Ejemplo:
La carta XIX El Sol, ayuda a que nos miremos con amor y dulzura. Conecta con nuestro niño interior, con su fuerza, candor e inocencia. Nos recuerda que a pesar de las dificultades, problemas y preocupaciones, confiemos en nosotros mismos, en nuestra brújula interior.
A nivel sanación: el tarot es energía, una energía muy sutil, que aporta su fuerza cuando la necesitamos. Podemos utilizarla para armonizar, desbloquear, potenciar…
Ejemplo:
La carta XIX El Sol: podemos ponerla o visualizarla en el chacra corazón o en cualquier punto del cuerpo donde lo sintamos. Si tenemos un bloqueo energético puede aliviarlo, armonizarlo. Aporta bienestar, calma, conexión con uno mismo.
En Spiral Áurea trabajamos con el tarot de manera integral, es decir, adaptándose a las necesidades, circunstancias o procesos que se viven en cada momento.
En nuestras sesiones de tarot encontrarás información, orientación, apoyo, guía que te ayuden en tu día a día, ya sea desde lo más concreto, a un trabajo de crecimiento personal y evolutivo a lo más espiritual.
Si estás interesado en solicitar una sesión de tarot puedes contactarnos a través de info@spiralaurea.com y por whatsapp 606 601805.
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